Conducción

Tener diabetes no significa que deba dejar de conducir, pero sí significa que debe planear con anticipación antes de ponerse al volante.

La legislación actual exige a los diabéticos que pretendan sacarse el carnet de conducir o renovarlo, una serie de requisitos.

– Si el diabético tiene un control metabólico continuo, presenta un estado de salud favorable y no ha sufrido pérdidas de conciencia en el último año, podrá sacarse o renovar el carnet de conducir.

– En el caso de que el diabético tenga diabetes  tipo 2, no necesite tratamiento insulínico y tenga un informe médico favorable, contará con el plazo de vigencia del carnet ordinario.

– Si en la circunstancia anterior no cuenta con un informe tan favorable, la vigencia del carnet será menor (3 – 5 años). En este caso, los carnets de transporte pesado y maquinaria C, C+E, D, D+E y de las subcategorías C1, C1+E, D1 y D1+E, así como en el carnet B cuando se usa para trasporte público, también ven cómo se reduce la vigencia a un año, teniendo que renovar el permiso de conducir de forma anual.

– Si el diabético es de tipo 1 y con riesgo de sufrir cuadros de hipoglucemia o  tipo 2 que esté tratado con insulina, la ley es mucho más estricta: se obliga a renovar el carnet cada año para los permisos A, A2, A1, B, B1 y B + E. Para los permisos de transporte pesado y maquinaria, la obtención o prórroga del permiso será excepcional tras el visto bueno de un examen médico especial y tendrá una vigencia de  6 meses.