Tengo que ir al hospital, ¿qué debería tener en cuenta?

Puede que tenga una estancia en el hospital (larga o corta) y puede ser por motivos relacionados con la diabetes, o no.

Aquí hay algunas cosas que pensar:

El hospital debería proporcionarle la insulina que normalmente usa, pero esto puede llevar algo de tiempo, así que lleve su propia medicación con usted para evitar demoras.
Lleve sus propios equipos para la diabetes, por ejemplo, un kit de análisis de glucemia capilar o suministros para la bomba (es probable que no puedan proporcionarle esto).
El personal que le atiende debe estar al día con su historial de diabetes, pero confírmelo con su equipo de atención médica.
No suponga que todos los que lo tratan sabrán que tiene diabetes; siempre es mejor ser demasiado precavido y seguir mencionándolo.
Mientras esté en el hospital, sus niveles de glucosa en sangre pueden ser más altos o más bajos de lo normal. El estrés y los períodos más largos de inactividad son solo dos razones por las cuales sus niveles de glucosa en sangre pueden necesitar ser evaluados con más frecuencia y ajustar el tratamiento.
Si desea controlar su diabetes usted mismo mientras está en el hospital, le deberían dar soporte para ello.

¿Qué tengo que hacer en caso de accidente?

Es posible que se encuentre en una situación en la que necesite atención médica por algo que no sea la diabetes, como un accidente o lesión. Esto podría implicar una espera prolongada en el hospital antes de ser visto. Tan pronto como llegue, asegúrese de decirle a alguien que tiene diabetes y que quizás necesite comer para evitar la hipoglucemia (generalmente se recomienda a las personas no comer ni beber mientras están en urgencias en caso de que necesiten cirugía). Si siente que necesita comer o beber, consulte primero con el personal.

¿Qué comer cuando estoy enfermo?

Comer y beber puede ser un gran problema cuando estás enfermo, pero si es posible, es importante seguir su plan de alimentación habitual. Además de sus comidas normales, tome abundantes líquidos principalmente agua o infusiones para evitar la deshidratación.

¿Qué pasa si no puede seguir su plan de comidas habitual?  Trate de ingerir su cantidad habitual de calorías comiendo alimentos fáciles de digerir como gelatina normal (no light), galletas saladas, sopas, puré de manzana ó puré de verduras suave (calabaza, calabacín, zanahoria, cremas de arroz).

Cuando su estómago esté algo trastornado, intente ingerir pequeñas cantidades de comidas, para ver la tolerancia a determinados alimentos. Pruebe con los carbohidratos presentes en:

Pan de molde
Pasta cocidos
Puré de patatas, zanahoria
Sopa de fideos o arroz
Galletitas saladas
Gelatina
Crema de arroz
Muchos alimentos tienen la cantidad correcta de carbohidratos (alrededor de 15 gramos) para cubrir sus necesidades mientras esté enfermo. Recuerde, en días de enfermedad, está bien comer algunos alimentos que normalmente no come, solo, si no puede comer sus alimentos habituales, para evitar hipoglucemias. Algunos alimentos que puede tomar son:

½ vaso de zumo de manzana
½ vaso de refresco regular (no light, libre de cafeína)
1 helado
1 rebanada de pan tostado
½ taza de pasta cocida
6 galletitas saladas
½ tarrina de yogur helado
1 vaso de bebida deportiva
½ tarrina de helado normal (si no está vomitando)
¼ vaso de sorbete
¼ taza de pudin (si no está vomitando)
½ taza de gelatina normal
1 taza de yogur, sin azúcar o simple
Frutas cocidas o en compota
Si vomita, no beba ni coma nada durante 1 hora. Descanse, pero no se acueste. Después de 1 hora, tome pequeños sorbos si es posible e suero ó si no tiene en casa en su defecto refresco ó suero casero, cada 10 minutos.

Los líquidos que puede beber si está deshidratado son:

Agua

Suero preparado o fabricado de forma casera
Agua carbonatada
Agua carbonatada sin cafeína
Zumo de tomate
Caldo de pollo desgrasado
Si su nivel de azúcar en la sangre es menos de 100 mg / dL o disminuye rápidamente, está bien tomar líquidos que contengan azúcar, y posteriormente confirme sus nuevos niveles.

Líquidos que puede beber si su nivel de azúcar en sangre es bajo:

Zumo de manzana
Zumo de naranja
Zumo de uva
Bebida deportiva, tipo acuarius
Té con miel
Bebidas de lima y limón
Si es posible suero, siempre mejor.
Si ya se ha administrado su insulina y se encuentra mal del estómago, tome suficientes líquidos con la misma cantidad de carbohidratos que normalmente comería. Si no tolera los alimentos o líquidos, vaya a urgencias para recibir tratamiento. Recibirá líquidos por vía intravenosa.

Comer en un restaurante

Si tiene un plan de alimentación para la diabetes, esto no significa que no pueda salir a comer. Su comida en un restaurante puede formar parte de su alimentación habitual, si está al tanto de lo que necesita. Aquí encontrará algunas sugerencias sobre cómo facilitar el proceso de ir a un restaurante y mantenerse firme a su plan de alimentación:

Buscar menús de restaurantes

Cuando sea posible disponer del menú online, puede echar un vistazo al menú del restaurante y comprobar si están disponibles los datos nutricionales, o los ingredientes de los platos.

Mantenga los tamaños de las raciones bajo control

En general, debe comer moderadamente. Intente evitar las raciones grandes: elija el tamaño de plato más pequeño si el restaurante le da la opción. Si el tamaño de la ración le parece excesivo, comparta comidas con sus acompañantes o solicite un recipiente para llevar a casa la comida sobrante.

Considere evitar buffets “todo lo que pueda comer”. Estos hacen que resistirse y moderarse sea difícil. Si no puede evitarlo procure coger un plato normalito y poner en este los alimentos que pretende comer y no vale repetir plato más de una vez.

Hacer sustituciones

No se conforme con lo que viene en la carta, personalícelo de acuerdo a sus necesidades. Por ejemplo, sustituya las patatas fritas por verduras a la parrilla ó alguna ensalada. No tenga miedo de preguntar.

Mirar los extras

Tenga en cuenta que los extras, como pedacitos de bacon, picatostes o patatas fritas, pueden alterar los objetivos nutricionales de la diabetes aumentando rápidamente el total de calorías y carbohidratos de una comida.

Incluso los extras más saludables, como el aliño de ensalada libre de grasas, la salsa barbacoa y la mayonesa sin grasa, tienen calorías. Pero puede disfrutar pequeñas porciones de estos sin ajustar su plan de comidas. Pídales a los que estén a su lado que le controlen lo que come.

Hable con el camarero ó cocinero

La preparación de alimentos también es algo a considerar. Evite la comida empanada y frita. En cambio, solicite que su comida sea preferentemente  hervida, a la parrilla o asada.
No se sienta presionado si solicita opciones o sustituciones más saludables. Simplemente haga lo más adecuado para mantener su plan de comidas.

Vigile lo que beba.

Recuerde que las calorías también provienen de las bebidas, así que evite las bebidas altas en calorías. En lugar de refrescos, pida lo siguiente: refrescos sin azúcar o ligth, agua, té helado sin azúcar, agua con gas o agua mineral. Recuerde también, que el alcohol puede ser muy problemático. Si su diabetes está bajo control y su médico está de acuerdo, una bebida alcohólica ocasional con una comida está bien. Pero el alcohol es rico en calorías vacías y puede conducir a complicaciones de la diabetes. Cuando elija alcohol, elija opciones con menos calorías y carbohidratos, como cerveza baja en calorías o vino.
Limite el consumo de alcohol a no más de dos bebidas al día, si es hombre y una bebida al día si es mujer.

Cumplir o mantener el horario de comidas

Su horario de comidas es importante para mantener los niveles estables de azúcar en la sangre, especialmente si está tomando medicamentos o insulina.

Si va a comer fuera con otras personas, siga estos consejos: programe la reunión a la hora de la comida habitual. Para evitar esperar una mesa, haga una reserva o trate de evitar los horarios en los que el restaurante esté más concurrido. Si no puede evitar comer más tarde de lo normal, meriende una fruta o una porción de almidón a la hora de su comida habitual.

Ahorre espacio para el postre

Recuerde que el postre no está necesariamente fuera de los límites. Los dulces cuentan como carbohidratos en su plan de comidas (si es posible evitar el dulce, mucho mejor y sobre todo si es de elaboración industria. Si lo come mejor de elaboración casera). Si desea un postre, compense reduciendo la cantidad de otros carbohidratos, como pan, tortillas, arroz, leche o patatas, en su comida.

Recuerda las reglas básicas

Ya sea comiendo en casa o fuera, recuerde los principios de la nutrición en la diabetes. Coma una variedad de alimentos saludables. Limite la cantidad de grasa y sal en su dieta. Mantenga el tamaño de las raciones bajo control. Y, sobre todo, siga las pautas de nutrición establecidas por su médico o dietista.

 

Controles de glucemia. Medicamentos y glucosa en sangre.

Cada enfermo diabético puede necesitar distintos grados de control de las cifras de glucosa en sangre.

Como regla general, los diabéticos tipo 1 necesitan chequear sus niveles varias veces al día, fundamentalmente alrededor de las comidas, pero a veces necesitan más controles, especialmente cuando están enfermos. Ciertos diabéticos tipo 2 pueden necesitar un enfoque similar, especialmente los pacientes jóvenes y que necesiten insulina. En los pacientes con medicamentos orales, o aquellos con menor necesidad de control estricto, estos controles pueden ser más espaciados.

a) Medicamentos para la diabetes

Cuando esté enfermo, necesitará continuar tomando su medicación para su diabetes. Incluso si vomita, no suspenda sus medicamentos. Los necesita porque su cuerpo produce glucosa extra (azúcar) cuando está enfermo. Si tiene diabetes tipo 1, es posible que deba inyectarse insulina adicional para reducir los altos niveles de glucosa en sangre. Si tiene diabetes tipo 2, puede tomar sus pastillas, o puede necesitar insulina por un corto tiempo. En cualquier caso, contacte con su médico para desarrollar su plan mientras esté enfermo.

b) Otros Medicamentos

Revise siempre la etiqueta de todos los medicamentos antes de comprarlos para ver si contienen azúcar. Normalmente estas dosis de azúcar no deben alterar su control, pero pregunte al farmacéutico o a su equipo.

Muchos medicamentos pueden afectar sus niveles de glucosa en sangre, incluso si no contienen azúcar. Por ejemplo, la aspirina en grandes dosis puede reducir los niveles de glucosa en sangre. Algunos antibióticos reducen los niveles de glucosa en la sangre en personas con diabetes tipo 2 que toman pastillas para la diabetes. Los descongestionantes y algunos productos para tratar los resfriados aumentan los niveles de glucosa en la sangre.

Si debe ir a urgencias o ver a un médico diferente al habitual, asegúrese de decir que tiene diabetes. Enumere todos los medicamentos que está tomando.

 

Atletas diabéticos con éxito

El ejercicio físico es básico para tener controlada su diabetes. Aunque su objetivo es mantener un peso y condicion general correcta, en este articulo se repasan algunos ejemplos de como la diabetes no tiene porqué ser un obstáculo para llegar a ser deportista de élite:

http://www.marca.com/otros-deportes/album/2016/11/14/5829c3c522601dff768b45d1.html

 

Cómo manejar tu diabetes cuando estás enfermo

Hacer un plan diario de enfermedad

Prepare un plan por adelantado para los días en los que esté enfermo. Trabaje con su médico o con un educador en diabetes. El plan incluirá cuándocontactar con su médico. No necesita llamar a su médico cada vez que tiene un resfriado. Pero es probable que desee llamar si ocurren ciertas cosas.

Por ejemplo:

  • Ha estado enfermo o ha tenido fiebre durante un par de días y no está mejorando
  • Ha estado vomitando o ha tenido diarrea durante más de 6 horas
  • Tiene cantidades moderadas o grandes de cetonas en la orina
  • Sus niveles de glucosa son más altos que 240 mg/dL a pesar de haber tomado la insulina adicional que su plan de enfermedad exige
  • Toma pastillas para su diabetes y su nivel de glucosa en sangre sube a más de 240 mg/dL antes de las comidas y permanece ahí durante más de 24 horas
  • Tiene síntomas que pueden indicar cetoacidosis o deshidratación o alguna otra afección grave (por ejemplo, le duele el pecho, tiene problemas para respirar, su aliento huele a fruta o los labios o la lengua están secos y agrietados)
  • No está seguro de qué hacer para cuidarse

Esté preparado para decir qué medicamentos ha tomado y cuánto, cuánto tiempo ha estado enfermo, si puede comer y mantener la comida, si ha perdido peso y cuál es su temperatura, niveles de glucosa en sangre y cetonas en la orina. Para estar preparado, tenga registrado todas estas cosas tan pronto como enferme.

¿Qué hacer en caso de hipoglucemia?

Todas las personas con diabetes deben estar preparadas para tratar una hipoglucemia, pero las personas con el tipo 1 tienen mayor riesgo de hipoglucemia. Las personas con tipo 2 tienen menos probabilidades de tener problemas de hipoglucemia durante o después del ejercicio, a menos que estén con insulina o con un secretagogo de insulina.

Si experimenta hipoglucemia durante o después del ejercicio, trátelo de inmediato. Use el mismo proceso que lo haría en cualquier otro momento del día:

Tenga al menos 15-20 gramos de carbohidratos de acción rápida (bebidas deportivas, refrescos o tabletas de glucosa son buenas ideas).
Espere de 15 a 20 minutos y revise su nivel de glucosa en sangre nuevamente.
Si aún es bajo y sus síntomas de hipoglucemia no desaparecen, repita el tratamiento.
Cuando se sienta mejor, asegúrese de comer comidas y refrigerios según lo planificado para mantener el nivel de glucosa en sangre.

 

Si desea continuar con su entrenamiento, por lo general necesitará un descanso para tratar su bajo nivel de glucosa en sangre que dependerá  de la actividad que esté haciendo y la cantidad de insulina que circule en el torrente sanguíneo. Si deja de hacer ejercicio, verifique que su nivel de glucosa en sangre haya subido por encima de 100 mg/dl antes de comenzar a hacer ejercicio nuevamente.

Tenga en cuenta que la glucosa baja en sangre puede ocurrir durante o después de la actividad física. Es más probable que ocurra si usted:

Toma insulina o un secretagogo de insulina
Omite una comida o no come algo entre 30 minutos y dos horas después de parar
Hace ejercicio prolongado
Se ejercita enérgicamente
Si la hipoglucemia interfiere regularmente con su rutina de ejercicios, hable con su médico sobre cómo ajustar su plan de tratamiento. Este puede sugerirle tomar un pequeño refrigerio antes de hacer ejercicio o puede ajustar su(s) medicamento(s).

¿Cómo puedo superar mis barreras para hacer ejercicio?

Si no está activo, es probable que tenga al menos una barrera o razón. Quizás, nunca haya sido muy activo. Quizá tenga miedo de que disminuya su nivel de glucosa en sangre.

Piense en lo que le impide mantenerse activo y luego vea algunas de nuestras soluciones a las barreras más comunes para la actividad física. ¿Hay una solución para ti?

No tengo tiempo para hacer ejercicio durante 30 minutos al día.

Piense en su día: ¿tiene espacios disponibles? Aproveche cualquier tiempo adicional que tenga. Si se encuentra esperando a que los niños acaben sus actividades o mirando cómo juegan, utilice ese tiempo para caminar o pasear mientras.
Haga tanto como pueda. Cada paso cuenta. Si está empezando, comience con 10 minutos al día y añada más, poco a poco. Realice sesiones de al menos 10 minutos, tres veces al día. También puede intentar sesiones de 15 minutos dos veces al día.
Haga que la actividad física sea parte de su rutina diaria. Por ejemplo, camine o vaya en bicicleta al trabajo o a la tienda, haga ejercicio mientras mira la televisión, tome las escaleras en lugar del ascensor o haga algo activo con su familia para pasar tiempo juntos.

Nunca he estado activo.

No descarte sus actividades diarias. Puede ser más activo de lo que piensa. La limpieza o cortar el césped cuentan como actividad. Estar activo es más que solo ejercicio planificado.
Si nunca ha estado activo o no ha estado activo por un tiempo, es importante comenzar lentamente. Si no se encuentra seguro sobre su salud, consulte con su médico antes de realizar grandes cambios en su plan de ejercicios.
Comenzar lentamente es importante y también lo es elegir actividades que disfrute. Con el tiempo, las actividades que hace serán más fáciles. Incluso encontrará que puede aumentar la duración y/o la intensidad.

Estoy muy cansado después del trabajo.

Encuentre un momento en que su energía sea la más alta. Podría planear hacer algo activo antes del trabajo o durante el día. Por ejemplo, podría intentar caminar durante 30 minutos durante su almuerzo algunos días a la semana o ir al gimnasio temprano por la mañana.
Recuerde que aumentar la cantidad de actividad física que hace, realmente aumentará su energía.

No tengo la ropa adecuada.

Use cualquier cosa que le resulte cómoda, siempre y cuando tenga calzado adecuado que le quede bien y calcetines que no irriten su piel.

Soy demasiado tímido para hacer ejercicio en grupo.

Elija una actividad que pueda hacer usted mismo, como seguir un programa de ejercicios aeróbicos en la televisión o salir a caminar.
Recuerde que las actividades cotidianas que realiza por su cuenta, como la jardinería y las tareas domésticas, lo ponen en movimiento y lo ayudan a quemar calorías.

No quiero tener dolor musculares.

El ejercicio no debería doler si va despacio al principio. Elija algo que pueda hacer sin dolor.
Asegúrese de calentar y enfriar.

Me temo que mi nivel de glucosa en sangre bajará demasiado.

Las personas que necesitan tener más cuidado con los niveles bajos son las personas con diabetes tipo 1 y las que usan insulina o secretagogos de insulina. Si está tomando un medicamento que podría causar un nivel bajo de glucosa en sangre, hable con su médico sobre las formas de hacer ejercicio de manera segura.
Prepárese para una potencial bajada de glucosa. Asegúrese de tener algunas Gatorade, tabletas de glucosa u otro carbohidrato de acción rápida para tratar una bajada si ocurriera. Usar una identificación de diabetes es otra precaución de seguridad importante. (Consulte nuestros “12 consejos de seguridad rápida”)

Caminar me lastima las rodillas.

Pruebe con ejercicios sentado, natación, ciclismo o una máquina elíptica. Estos y otros ejercicios de bajo impacto pueden ser menos dolorosos.

Hace demasiado calor afuera.

Si hace demasiado calor, demasiado frío o demasiada humedad, camine dentro de una escuela o un centro comercial.
Piense en algunas otras actividades que siempre están disponibles sin importar el clima, como usar una bicicleta estática, clases de aeróbic en interior, videos de yoga en casa, natación en interior, escalada, gimnasia en casa o baile.

Me temo que voy a empeorar mi enfermedad.

Recuerde que realizar suficiente actividad física es importante para la salud, tenga diabetes o no.
Recuerde que el ejercicio ayuda a reducir la hemoglobina glicosilada (HbA1c) y muchos otros beneficios para la salud. (Consulte nuestra lista de los beneficios de la actividad física).
Si tiene complicaciones de la diabetes y no está seguro de su salud, hable con su médico antes de realizar cambios importantes en su rutina de ejercicios.

No puedo permitirme unirme a un gimnasio o comprar equipamiento.

Haga algo que no requiera un equipo sofisticado, como caminar, hacer footing, gimnasia o usar botellas de agua para hacer pesas.
Los ejercicios de saltar la comba y la banda de resistencia son otras actividades que solo requieren un equipo de bajo coste.
Busque recursos de bajo coste en su comunidad, como programas de educación comunitaria, programas de parques y recreación, senderos para caminar, pistas de atletismo escolares o programas de bienestar en el lugar de trabajo.

El ejercicio es aburrido.

Encuentre algo con lo que disfrute. Haga cosas variadas. Pruebe diferentes actividades en diferentes días y asegúrese de elegir una actividad que disfrute. Haga ejercicio con otra persona que le haga compañía. Si puede, intente hacer ejercicio mientras escucha música o mira la televisión.

Realmente no sé cómo hacer ejercicio.

Seleccione actividades que requieran pocas habilidades, como subir escaleras, caminar o hacer footing. Cuando se encuentre cómodo con ésto, seguramente encuentre nuevas formas de seguir avanzando..

No tengo la motivación para hacer ejercicio.

Invite a un miembro de su familia o amigo a ejercitarse con usted regularmente. También puede unirse a un grupo o apuntarse a una clase de ejercicios en su comunidad. Recuerde todos los beneficios que conlleva estar físicamente activo. Haga un plan para decidir cuándo hará cada tipo de actividad. Asegúrese de establecer metas realistas y hacer un plan en el que sepa para lo que está trabajando.

Controles de glucosa y emociones

Muchas personas con diabetes sienten emociones negativas sobre el control de la glucosa, principalmente porque enfocan demasiado su atención en el resultado de la medición. Básicamente, las personas se ‘castigan’ a sí mismas emocionalmente cuando tienen niveles altos o bajos de azúcar en la sangre. Estos pensamientos suelen ser del tipo ” Debería haber hecho esto … ” o ” No debería haber hecho eso … ”, culpándose a sí mismos por no tener niveles de glucosa dentro de los limites deseados, lo que incluso podría llevar a una reacción de estrés, que aumenta los niveles de azúcar en la sangre.

En estos casos, nuestro consejo es que deje de culparse por los resultados de la glucemia. Concéntrese realmente en su comportamiento. Cuando se haga usted los controles de glucemia programados, piense en algo positivo, como “¡Bien hecho!”, independientemente del resultado. Con esto, usted refuerza que  está haciendo cosas positivas. De hecho, si el resultado no era lo que esperaba, ahora puede usted hacer cosas para mejorar esa glucosa, asi que “Estupendo!”. Si desea cambiar sus sentimientos negativos sobre la monitorización, intente hacerse un cumplido cada vez que lo haga. ¡De hecho, es aún más productivo cuando deja que otros le feliciten al ver que está haciéndose esos controles!