Controles de glucosa y emociones

Muchas personas con diabetes sienten emociones negativas sobre el control de la glucosa, principalmente porque enfocan demasiado su atención en el resultado de la medición. Básicamente, las personas se ‘castigan’ a sí mismas emocionalmente cuando tienen niveles altos o bajos de azúcar en la sangre. Estos pensamientos suelen ser del tipo ” Debería haber hecho esto … ” o ” No debería haber hecho eso … ”, culpándose a sí mismos por no tener niveles de glucosa dentro de los limites deseados, lo que incluso podría llevar a una reacción de estrés, que aumenta los niveles de azúcar en la sangre.

En estos casos, nuestro consejo es que deje de culparse por los resultados de la glucemia. Concéntrese realmente en su comportamiento. Cuando se haga usted los controles de glucemia programados, piense en algo positivo, como “¡Bien hecho!”, independientemente del resultado. Con esto, usted refuerza que  está haciendo cosas positivas. De hecho, si el resultado no era lo que esperaba, ahora puede usted hacer cosas para mejorar esa glucosa, asi que “Estupendo!”. Si desea cambiar sus sentimientos negativos sobre la monitorización, intente hacerse un cumplido cada vez que lo haga. ¡De hecho, es aún más productivo cuando deja que otros le feliciten al ver que está haciéndose esos controles!

 

Me olvido de algunas partes del autocuidado de mi Diabetes

En la práctica diaria, muchas personas con diabetes dicen que se “olvidan” de partes específicas de la autogestión de la diabetes: vigilar sus niveles de glucosa, inyectarse la insulina, tomar sus pastillas, controlar la cantidad de carbohidratos de sus comidas o hacer ejercicio. No es que no estén motivados, sino que simplemente no es una respuesta automática (todavía). Etso es comprensible, ya que la diabetes es una enfermedad compleja con muchas cosas que hacer. Un olvido ocasional no influye mucho en los valores promedio de glucosa (HbA1c). Sin embargo, cuando las “omisiones” son  más regulares, habría que pensar en por qué sucede esto y cómo resolverlo.

Lo primero que debe preguntarse es si realmente “no pensó en hacerlo en absoluto”. Si es eso, es fácil encontrar ayuda. Por ejemplo, usted podría poner un recordatorio en su teléfono o el ordenador, una nota escrita en un lugar que vea la mayor parte del día, y explicarle su plan a alguien de su entorno, para que le recuerde si ha realizado las tareas de su diabetes. Otras personas no es que no quieran u olviden realizar las tareas de su diabetes, sino que las van posponiendo: “estaba pensando en ello por segundo / minuto, pero no quería / no podía detener la otra actividad que estaba realizando.